En álgebra, una ecuación de cuarto grado o ecuación cuártica con una incógnita es una ecuación algebraica[1] que asume la llamada forma canónica:
Ecuación de cuarto grado
donde a, b, c, d y e (siendo ) son números que pertenecen a un cuerpo, usualmente a los racionales y ocasionalmente son los números reales o los complejos.
Sea K un cuerpo, donde se pueden extraer raíces cuadradas y cúbicas y por lo tanto también de cuarto orden, pues equivale a extraer raíces cuadradas dos veces seguidas.
En este cuerpo, es posible factorizar por todo a, y la identidad siguiente es válida:
.[2][3]
En un cuerpo algebraicamente cerrado, se sabe que todo polinomio de grado 4 tiene cuatro raíces. Es el caso del cuerpo de los complejos, según el Teorema Fundamental del Álgebra.
que es unitaria, como polinomio para valores reales nunca se anula.
Por lo tanto sus cuatro raíces son complejas, en pares de conjugados. Precisamente la raíces quintas primitivas de la unidad. Estructuradas sobre la base de seno y coseno de radianes y sus múltiplos hasta el cuarto.[5]
Existen métodos resolutivos para resolver ecuaciones de cuarto grado, con los cuales podemos llegar a las soluciones de éstas, por lo que el conjunto de los números reales no es algebraicamente cerrado, resultando siempre en cuatro soluciones, comúnmente en dos soluciones reales y dos soluciones complejas conjugadas (pero no siempre puede resultar así). Se puede aproximar las soluciones de la ecuación con el método de Newton-Raphson, pero solo se obtendrá una de las soluciones reales, haciendo que este método resulte muy desventajoso por sus limitaciones en el contexto del cálculo infinitesimal.
Sea el polinomio al que se quiere hallar sus raíces cuyos coeficientes son enteros, consideremos a un factor lineal como uno de los divisores de dicho polinomio, donde es posible hallar un cociente de tercer grado que puede ser resuelto aplicando factorización nuevamente, o resolviéndolo por el método de Cardano (si dicho cociente cúbico es irreducible por factores racionales). Al efectuar la división de y , obtenemos el cociente dado por
,
cuyo residuo resultante es:
,
por lo que si , entonces es una raíz racional de y por tanto, es una división exacta. Sin embargo, si , entonces es un polinomio irreducible, y debe resolverse por métodos alternativos.
que puede ser resuelta por el método de Cardano, donde es considerada una raíz real de esta (sin importar si es una raíz real positiva o negativa), siendo de primera prioridad la primera raíz. No obstante, la naturaleza de las raíces de la ecuación cúbica resolvente determinará las soluciones de la ecuación original, considerando las siguientes posibilidades:
1) Si la ecuación cúbica resolvente tiene una raíz real, la ecuación cuártica tendrá dos soluciones reales y dos soluciones complejas conjugadas.
2) Si la ecuación cúbica resolvente tiene dos o tres raíces reales, la ecuación cuártica tendrá cuatro soluciones de manera aleatoria definidas así:
a) Cuatro soluciones reales distintas.
b) Dos pares de soluciones complejas conjugadas.
c) Dos raíces reales dobles.
d) Una raíz real simple y una raíz real triple.
e) Una raíz real cuádruple.
f) Una raíz real doble y dos soluciones complejas conjugadas.
g) Dos raíces complejas conjugadas dobles.
h) Una raíz real doble y dos raíces reales simples.
Una vez obtenemos la raíz positiva de la ecuación cúbica resolvente, calculamos los siguientes valores:
De estos valores, resolveremos dos ecuaciones cuadráticas:
Al resolverlas por la fórmula cuadrática, obtenemos las soluciones de la ecuación cuártica original:
La ecuación cúbica resolvente del método de Descartes es:
No obstante, a diferencia de la ecuación cúbica resolvente del método de Ferrari, una de sus raíces reales debe ser positiva, con la que resolveremos dos ecuaciones cuadráticas:
Al resolverlas por la fórmula cuadrática, entonces las soluciones de la ecuación cuártica reducida son (ordenándolas por signos positivos y negativos):
Como el objetivo es encontrar las soluciones de la ecuación original, utilizamos la siguiente fórmula:
Por otro lado, si utilizamos las relaciones de Cardano-Vieta en las soluciones de la ecuación cuártica original, podemos tener las componentes cúbica, cuadrática, lineal y el término independiente en la ecuación original:
la ecuación reducida es una ecuación bicuadrada, dado que . Dicha ecuación puede ser encontrada mediante las fórmulas de los coeficientes y , o mediante la transformación . Ambos métodos pueden ser laboriosos. Un método más sencillo se obtiene de convertir a la ecuación mónica:
De la condición se tiene que:
Entonces se puede escribir:
Así, la ecuación se expresa en la forma:
Se puede entonces resolver de forma directa la ecuación cuadrática
y después la cuadrática
para cada valor de
Otro método posible es expresar la ecuación anterior en la forma:
Las raíces de la ecuación original pueden ser obtenidas resolviendo las siguientes ecuaciones cuadráticas:
Si no es igual a uno en , este método es de todas formas aplicable, luego de dividir la ecuación entre .
Las ecuaciones cuasisimétricas poseen la siguiente propiedad, que, por otra parte, las define: si , , y , son las raíces de la ecuación, entonces . Dado que el producto de las 4 raíces es , entonces necesariamente.
OTRAS SOLUCIONES ALGEBRAICAS A LAS ECUACIONES POLINÓMICAS DE TERCER Y CUARTO GRADO de LUIS ALBERTO RAMÍREZ CASTELLANOS, revista de matemática de la universidad del Atlántico, MATUA, vol. 5 N.º 2 2018.