Soleá (estrofa)
La soleá es una combinación métrica propia de la lírica popular andaluza, compuesta por tres versos de arte menor octosílabos con asonancia en el primer y el tercer verso y sin rima de ninguna especie el segundo (8a, 8-, 8a). Se la conoce también con el nombre de "terceto gallego" o "terceto celta". Entendida como composición poética, suele versar sobre el tema de la soledad y el desengaño.[1][2] El plural de soleá es soleares.
La soleariya es un derivado de la soleá, en la que el primer verso es hexasílabo y los otros dos endecasílabos. Como variante, la soleariya puede presentar la siguiente estructura: un primer verso hexasílabo, un segundo verso de arte mayor de entre 10 y 12 sílabas, y un tercer verso hexasílabo. En los dos casos citados, la soleariya presenta la rima característica de la soleá, rimando los versos impares en asonante y quedando el segundo libre.
La soleá ha traspasado los límites de la literatura popular andaluza, incorporándose a la obra de autores como Manuel Machado, quien usó soleares y soleariyas en su libro Cante hondo (1912).
Tengo un querer y una pena.
La pena quiere que viva;
el querer quiere que muera
(soleá)
Llorando, llorando
nochecita oscura, por aquel camino
la andaba buscando.
(soleariya)
La soleá es considerada como uno de los "cantes grandes" del género flamenco.
Véase también
editarNotas
editarBibliografía
editar- QUILIS, Antonio. Métrica española. Ariel, Madrid. 2001. 14ª edición.
- DOMÍNGUEZ CAPARRÓS, José. Diccionario de métrica española. Paraninfo, Madrid. 1985.