Ricardo López Cabrera

pintor español

Ricardo López Cabrera (Cantillana, 28 de septiembre de 1864-Sevilla, 7 de enero de 1950) fue un pintor español que se formó en la Escuela de Bellas Artes de Sevilla, siendo sus maestros Eduardo Cano y José Jiménez Aranda.

Ricardo López Cabrera
Información personal
Nacimiento 28 de septiembre de 1864 Ver y modificar los datos en Wikidata
Cantillana (España) Ver y modificar los datos en Wikidata
Fallecimiento 7 de enero de 1950 Ver y modificar los datos en Wikidata (85 años)
Sevilla (España) Ver y modificar los datos en Wikidata
Nacionalidad Española
Familia
Hijos Bernardino de Pantorba Ver y modificar los datos en Wikidata
Educación
Educado en Real Academia de Bellas Artes de Santa Isabel de Hungría Ver y modificar los datos en Wikidata
Alumno de
Información profesional
Ocupación Pintor Ver y modificar los datos en Wikidata
Miembro de Real Academia de Bellas Artes de Santa Isabel de Hungría Ver y modificar los datos en Wikidata

Biografía

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Tras su primera etapa sevillana, en 1887 se trasladó a Roma para continuar sus estudios, gracias a una oposición convocada por la Diputación Provincial de Sevilla para cubrir una plaza de pensionado, que ganó. Allí permaneció cuatro años. “El dominio del dibujo y del estudio de la perspectiva fueron una de sus principales preocupaciones artísticas […] dentro siempre de un riguroso espíritu académico"[1]​ Muestra de ello es su obra Gladiador (1888) que se encuentra expuesta en el Museo de Bellas Artes de Sevilla. “Figura, en tamaño natural, de un gladiador victorioso del circo romano”.[2]​ Aparece desnudo, mostrando su musculatura. También pintó algunos paisajes en Venecia en estos años fuera de España.

De vuelta a su ciudad natal, se casó el 2 de octubre de 1895 con Rosario, hija de Jiménez Aranda que comienza a ejercer como maestro suyo en esta época, en la que gozó de prestigio. Realiza una obra en la casa de los Marqueses de Angulo, en el dormitorio, en cuyo techo representa La apoteosis de las Artes, en el año 1899. En 1906 es nombrado miembro de la Real Academia de Bellas Artes de Santa Isabel de Hungría de Sevilla.

En 1909 se instaló en Argentina, debido a la escasez de posibilidades comerciales para su obra en la capital hispalense, residiendo en la ciudad de Córdoba hasta 1923. Durante este periodo compaginó su actividad artística con la enseñanza en la Escuela de Bellas Artes. Prefirió esta ciudad para establecerse a Buenos Aires (eje de la cultura artística) por su placidez, ya que, tal y como expresa su hijo, él “huyó siempre que pudo del tráfago de las grandes urbes. Estas le crispaban los nervios”.[3]

En febrero de 1923 regresa a España, dedicando cinco años a pintar quince trípticos sobre temas costumbristas de las diferentes regiones españolas: Andalucía, Aragón, Asturias, Baleares, Canarias, Castilla la Nueva, Castilla la Vieja, Cataluña, Extremadura, Galicia, León, Murcia, Navarra, Valencia y País Vasco. Cada tríptico consta de un lienzo central, casi cuadrado, de 1.25 x 1.50 m y dos laterales de menor altura de 1.10 x 0.85, estando todos ellos pintados al natural, sin fotografías ni modelos profesionales, en sus lugares de origen. Fue llamada por él “la obra”, a la que otorgó tanta importancia que para poder financiarla en ocasiones tuvo que hacer exposiciones y retratos destinados a la venta. Todos juntos miden 48 metros de largo. “Los lienzos centrales correspondientes a los dos archipiélagos – el balear y el canario - representan paisajes, sin ninguna figura humana. Todos los demás recogen figuras de hombres y mujeres con indumentos populares de sus respectivas regiones, sobre fondos típicos, de interior o al aire libre”.[4]

Permaneció en España hasta su muerte en Sevilla el 7 de enero de 1950 a los 85 años, aunque en estos últimos años de vida tuvo problemas de salud (demencia senil) que lo mantuvieron alejado de la pintura.

Su producción artística incluye una amplia temática, en su primera etapa trata desde el tema costumbrista o los “casacones”, hasta el retrato y el paisaje, incluyendo diversas obras realizadas en la costa andaluza de Rota y Chipiona, con temas de pescadores, siendo claramente perceptible la influencia de Sorolla en estos trabajos.

En su etapa de madurez predominan los temas regionales y paisajes, especialmente los de Alcalá de Guadaira a las afueras de Sevilla.

Selección de Obras

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Retrato de Rosario Jiménez, Colección Bellver

Referencias

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  1. VALDIVIESO, E., Historia de la pintura sevillana. Siglos XIII al XX. Ediciones Guadalquivir, S.L., Sevilla, 1986. P.446.
  2. Bernardino de Pantorba, El pintor López Cabrera. Ensayo biográfico y crítico. Compañía Bibliográfica Española, Madrid, 1966. p.13
  3. Ibid.:p.25.
  4. Ibid.:p.42.

Enlaces externos

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