La Puerta Collina (latín Porta Collina) fue un monumento emblemático de la antigua Roma, supuestamente construido por Servio Tulio, semi-legendario rey de Roma. 578-535 A.C. La puerta se encontraba en el extremo norte de la Muralla Serviana, y junto a ella había dos calles importantes, la Vía Salaria y la Vía Nomentana. Dentro de esta zona, la Alta Semita unía la Quirinal con la Porta Carmentalis.[1]​ Cerca de la puerta se encontraban varios templos, entre ellos templos de Venus Erycina[2]​ and Fortuna. Para una persona que estuviera frente a la puerta en el siglo III d. C., los Jardines de Salustio habrían estado a la izquierda, con las Termas de Diocleciano a la derecha.[3]

Mapa de la antigua Roma; Porta Collina al noreste
Porta Collina

Plutarco dice que, cuando una Vestal era castigada por violar su voto de castidad, la cámara subterránea para su entierro en vida se encontraba cerca de la Puerta del Colline.[4]​ La puerta fue la sitio de una batalla decisiva durante las guerras civiles romanas de los años 80 a. C. entre las fuerzas de Cinna y Sulla.[5]

Referencias

editar
  1. Sarolta A. Takács, Vestal Virgins, Sibyls, and Matrons: Women in Roman Religion (University of Texas Press, 2007), p. 88.
  2. Elaine Fantham, commentary on Ovid Fasti Book IV (Cambridge University Press, 1998), p. 255 online.
  3. Kim J. Hartswick, The Gardens of Sallust: A Changing Landscape (University of Texas Press, 2004), p. 143 online.
  4. Para el pasaje en su espantosa totalidad, véase Takács, Vírgenes Vestales, p. 87 online; discussion pp. 88–89.
  5. Michael Lovano, La era de Cinna: Crisol de la Roma republicana tardía (Franz Steiner Verlag, 2002), p. 129ff. online.