Principio de constancia
El principio de constancia es un
principio enunciado por Freud, según el cual el aparato psíquico tiende a mantener la cantidad de excitación en él contenida a un nivel tan bajo o, por lo menos, tan constante como sea posible. Esta constancia se obtiene, por una parte, mediante la descarga de la energía ya existente; por otra, mediante la evitación de lo que pudiera aumentar la cantidad de excitación, y la defensa contra este aumento.[1]
Véase también
editar- Principio de nirvana, concepto psicoanalítico
Referencias
editar- ↑ Laplanche, Jean (1996). Diccionario de psicoanálisis. Barcelona: Paidós. pp. 287-293. ISBN 9788449302565.