Paz de Almazán
La Paz de Almazán fue firmada entre Pedro IV de Aragón y Enrique II de Castilla el 12 de abril de 1375 en la ciudad de Almazán dentro del contexto hispano de la guerra de los Cien Años.[1]
La guerra entre las dos coronas que empezó en 1356 tuvo varias vicisitudes, pasando el reinado castellano, después de la victoria de Enrique sobre Pedro I de Castilla en 1369, a operaciones bélicas contra Aragón que había conquistado el señorío de Molina de Aragón, que pertenecía a la Corona de Castilla.
En ese momento Pedro IV, acuciado por diversos frentes y ante la alianza castellano-francesa, considera que, ante la posible invasión del ejército castellano, firma el tratado de paz por el que Molina de Aragón se reintegra a Castilla a cambio de una suma de dinero, se abandonan las reclamaciones sobre Murcia y se concierta el matrimonio de su hija Leonor de Aragón con Juan (futuro Juan I de Castilla), el heredero del trono de Castilla. Con este tratado se puede decir que se termina la guerra castellano-aragonesa y es uno de los hechos con los que se empieza a consagrar la futura hegemonía castellana en la península ibérica.[2]
Véase también
editarReferencias
editar- ↑ Gran Enciclopedia Aragonesa (ed.). «Paz de Almazán». Consultado el 24 de noviembre de 2018.
- ↑ Richard K. Emmerson (2006). Key Figures in Medieval Europe. An Enciclopedia. Enrique II, King of Castile. Routledge. p. 204. ISBN 978-0-415-97385-4.