Lisis de Tarento (¿? - 390 a. C.) fue un filósofo griego. Su vida es oscura, pero en general se acepta que durante la persecución de los pitagóricos en Crotona y Metaponto escapó y se fue a Tebas, donde se convirtió en maestro de Epaminondas, por el que mantuvo una alta estima.[1]​ También allí recibió la influencia de Filolao.

Le han sido acreditadas muchas obras normalmente atribuidas a Pitágoras.[2]Diógenes Laercio le atribuyó tres de ellas y Mullach le atribuyó incluso los Versos Dorados. Sin embargo, se suele considerar que estos versos no pertenecen a una única persona sino que son obra de varios autores.

Referencias

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  1. Pausanias, ix. 13. §1; Claudio Eliano, Varia Historia, iii. 17; Diodoro Siculo, Exc. de Virt. et Vit. 556; Plutarco, de Gen. Socr. 8, 13, 14, 16; Diógenes Laercio, viii. 39; Cornelio Nepote, Epam. 2; Jámblico, Vit. Pyth. 35.
  2. Diógenes Laercio, viii. 7.