Ley de segunda oportunidad
La ley de segunda oportunidad o ley 25/2015, de 28 de julio, de mecanismo de segunda oportunidad, reducción de la carga financiera y otras medidas de orden social.,[1] Dicha ley fue publicada el miércoles 29 de julio de 2015, en el boletín oficial del estado y entró en vigencia el jueves 30 de julio del mismo año, en España.[2] Esta ley está dirigida a personas particulares o empresas autónomas que con el tiempo hayan adquirido deudas que sean difíciles de eliminar, por haber llegado a una situación crítica en su estado de finanzas, para poder dar una solución a las mismas.[3]
La ley de segunda oportunidad no es un mecanismo para evitar pagar las deudas de un particular o autónomo, su único objetivo es propiciar una reestructuración del pago de las mismas, y llegar a un reequlibrio entre acreedores y deudores. En última instancia se puede llegar a producir la exoneración de la deuda si es verificable que la persona es incapaz de saldarla, sin poner en peligro su patrimonio presente y futuro.[4]
Entidades a las que afecta la ley
editarLa ley de segunda oportunidad está dirigida a personas particulares y profesionales por cuenta propia o autónomos en situación crítica financiera y sobre endeudamiento, ya que antes de esta ley no existía un vehículo legal claro para pedir la exoneración de sus deudas.[2][5][6]
Requisitos
editar- Que el deudor compense a sus acreedores con la cesión de los bienes no necesarios para el ejercicio de su actividad profesional o con acciones de su propia compañía. El valor de los bienes siempre tiene que ser menor o igual a la cantidad adeudada.[2] El valor de la deuda no debe superar los cinco millones de euros.[5]
- El emprendedor debe proponer un plan de viabilidad y un calendario de pagos para hacer frente a las deudas con sus acreedores. El plan de pagos no debe superar los diez años.[2]
- El deudor debe acumular un retraso de tres meses en el pago de sus obligaciones con las arcas públicas y no debe abonar por un periodo continuo facturas a diferentes abonados.[5]
- La persona física tiene que ser insolvente de buena fe, o sea que su situación de impago no sea adrede, que haya intentado pagar sus deudas, negociar con sus acreedores y que no haya cometido algún delito económico.[5]
- Que el deudor, en los 10 años anteriores, no haya sido condenado por delitos contra el patrimonio, el orden socioeconómico, de falsedad documental, Hacienda Pública, la Seguridad Social y los Derechos de los trabajadores.
¿Qué deudas puedo cancelar o replanificar?
editarSe puede trabajar con todo tipo de deudas, ya estén clasificadas como créditos privilegiados, subordinados y ordinarios, incluyendo las deudas con la Hacienda y la Seguridad Social.
No obstante, a partir de la reforma de la Ley Concursal 16/2022 del 5 de septiembre, se implementaron restricciones en cuanto a la exoneración de deudas con entidades públicas. En concreto, se establecieron los siguientes límites:
– Hacienda Pública: Un máximo de 10.000€.
– Seguridad Social: Un máximo de 10.000€.
¿Cuánto dura el proceso?
editarExisten diversos trámites y documentos que deben llevarse a cabo con una duración específica, lo que imposibilita determinar con certeza el tiempo necesario para la resolución.
El período de ejecución del proceso puede extenderse hasta 18 meses como máximo[7] por ley, dependiendo de la complejidad del asunto. Esta cifra representa el límite legal establecido para tales situaciones, aunque los casos más intrincados o aquellos en jurisdicciones con tribunales altamente congestionados podrían recibir una prórroga, alargando el plazo por algunos meses adicionales.
Iter procesal
editar- Presentar una solicitud de mediación, la misma se tiene que presentar ante el notario o registrador mercantil del domicilio del deudor, quién tiene la función de establecer un mediador concursal, quién a su vez trabajará para mediar los intereses de los acreedores y del deudor. El mediador remitirá a los acreedores un plan de pago, previamente conformidad con el deudor, teniendo en cuenta ingresos y gastos del deudor y su situación personal.[8]
- En caso de que el plan de pagos no sea aceptado por los acreedores, el mediador se debe presentar ante el Juzgado de Primera Instancia o al Juzgado Mercantil, una solicitud de concurso donde se incluya un plan de liquidación que prevea la forma de liquidación del activo del deudor.[8]
- Una vez se concluya la liquidación, se solicitará la conclusión del concurso y el juez solicitará la resolución condonando toda la deuda.[8][9]
Referencias
editar- ↑ «Boletín oficial del estado». BOE. 29 de julio de 2015. Consultado el 29 de junio de 2017.
- ↑ a b c d Otto, Carlos (4 de agosto de 2015). «Diez claves para entender la Ley de Segunda Oportunidad para emprendedores». El Confidencial. Consultado el 29 de junio de 2017.
- ↑ «¿Cómo sé que me puedo acoger a la Ley de la Segunda Oportunidad?». Blog de la Ley de Segunda Oportunidad. Archivado desde el original el 6 de agosto de 2017. Consultado el 29 de junio de 2017.
- ↑ «Ley De Segunda Oportunidad, la única solución si no puedes pagar las deudas». Abogados para tus deudas. 7 de febrero de 2018. Consultado el 5 de agosto de 2018.
- ↑ a b c d Hita, Elena (8 de mayo de 2016). «Ley de segunda oportunidad o de quiebra de personas, un fracaso». El Mundo. Consultado el 29 de junio de 2017.
- ↑ «Cómo funciona la Ley de Segunda Oportunidad: beneficios y requisitos». El Economista. 29 de febrero de 2016. Consultado el 29 de junio de 2017.
- ↑ «Ley de Segunda Oportunidad - Cancela tus deudas». Reclama por mi. 22 de enero de 2024. Consultado el 22 de enero de 2024.
- ↑ a b c Gallego, Isabel. «Ley de Segunda Oportunidad». Derecho News. Consultado el 29 de junio de 2017.
- ↑ Merlo, Yolanda (2 de abril de 2017). «Autónomo y Segunda Oportunidad: así puedes librarte de un aval». 5D. Consultado el 29 de junio de 2017.
Enlaces externos
editar- Ley 25/2015, de 28 de julio, de mecanismo de segunda oportunidad
- Ley de Segunda Oportunidad en las Palmas de Gran Canaria. Abogados en Las palmas. Reyes & Rodriguez los abogados para solucionar tus deudas
- Ley de Segunda Oportunidad 2024: Cambios, Novedades y su Impacto