Ialiso
En la mitología griega Ialiso era un rey de la isla de Rodas, primogénito de Cércafo y Cídipe.
Cuando murió Cércafo le sucedieron sus hijos Ialiso, Camiro y Lindo, que dividieron el reino en tres partes y fundaron sus respectivas capitales, a las que dieron sus nombres.[1] Así, Ialiso sería el fundador de la ciudad de Ialisos, cuyas ruinas aún se conservan y que es mencionada por Homero por acudir sus habitantes al sitio de Troya. En Ialisos vivieron también los terribles telquines, que recibieron por ello el epíteto de ialisios.[2]
Ialiso, caracterizado por su inteligencia y su mente despierta, es el personaje principal de una obra de Protógenes.[3] Tan admirada fue esta pintura en su época (destacaba la devoción hacia ella de Apeles) que salvó, según Plinio, a los rodios de morir a manos de Demetrio.[4]