Fibra oscura es la denominación que se atribuye a los circuitos de fibra óptica o redes oscuras, que han sido desplegados por cualquier entidad, ya sea su actividad relacionada con obras civiles o no, y que no están siendo utilizados. El alquiler, cesión, o venta por simplex, duplex o mayor cantidad de fibras se comercializa en bruto, de manera que es el propio usuario quien aplica la tecnología de transmisión más adecuada a sus necesidades, mejorando así el rendimiento obtenido puesto que se evitan limitaciones innecesarias de protocolos, entre otras posibles complicaciones.[1][2]

El equipo de fibra de Stealth Communications instala un nuevo cable de fibra óptica debajo de Madison Avenue, en la ciudad de Nueva York.

Origen y uso

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Cuando un operador o entidad de infraestructuras de telecomunicaciones despliega su red de fibra óptica, tiene que hacer una gran inversión en solicitar permisos burocráticos, realizar obra civil, construir las canalizaciones y desplegar el cableado de fibra óptica y sus terminaciones correspondientes.[3]​ Si en un futuro fuese necesario ampliar la capacidad de una red ya existente, sería necesario desplegar y conectar cables adicionales.[4]​ Dado lo costoso de la operación, resulta más adecuado sobredimensionar la red inicial instalando más cables de fibra óptica de los que son necesarios para una futura maniobra.[5]

Los cables de fibra pueden contener diferentes y numerosas cantidades de fibras: 4, 8, 16, 32, 64, 128, 144, 256, 288, 360, 432, 720, 864, 1728, 3456...[6][7][8]

Debido al sobredimensionamiento, la mayoría de fibras no se emplean. Las que quedan sin uso reciben el nombre de fibra oscura.

En muchos casos, estos cables nunca llegan a ser utilizados, es decir, nunca se realizan transmisiones a través de ellos. De ahí también la denominación de fibra oscura.

Interés comercial y de desarrollo

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Existen grandes compañías e instituciones de todo tipo que disponen de diversas redes alejadas entre sí por distancias considerables, y que tienen la necesidad de comunicarse en diversas circunstancias como a grandes distancias, en entornos con alta interferencia electromagnética, con complejas inclemencias o con grandes anchos de banda para interconectar e intercomunicar dichas redes. Las entidades mencionadas anteriormente pueden cubrir estas necesidades concretas alquilando sus circuitos de fibra oscura.

Centros de investigación y desarrollo, empresas industriales, grandes bancos u organizaciones gubernamentales usan fibra oscura para interconectar sus sedes, centros de procesamiento de datos, centros de respaldo, entre otras instalaciones.

Referencias

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Véase también

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Enlaces externos

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