Ensayo clínico independiente
Los ensayos clínicos pueden ser promovidos y financiados por una variedad de patrocinadores, tales como empresas farmacéuticas, gobiernos, organizaciones benéficas de investigación, fundaciones, organizaciones de médicos y asociaciones de voluntariado.
Los ensayos clínicos se definen como independientes cuando son promovidos por organizaciones científicas —académicas o sin ánimo de lucro— y financiadas con dinero público o de beneficencia, centros de investigación o asociaciones de voluntariado.[1][2]
Las compañías farmacéuticas, en estrecha colaboración con investigadores universitarios y médicos, financian la mayoría de los estudios clínicos sobre medicamentos y dispositivos. Estos estudios están orientados a la asistencia sanitaria y tienen como objetivo probar los beneficios de un tratamiento particular.[3][4]
Sin embargo, existe un gran número de preguntas de investigación clínica que son de poco o ningún interés para los patrocinadores comerciales, pero que deberían ser abordadas, dada su importancia para la salud pública y para mejorar las posibilidades de diagnóstico y terapia de grupos de pacientes más o menos numerosos. Es decir, responden a la pregunta: ¿cuál es la mejor opción de tratamiento para esta enfermedad, este paciente o grupo de pacientes? Además, estas preguntas se refieren no sólo a los fármacos y dispositivos, sino también a las nuevas intervenciones biomédicas, cirugía, fisioterapia, psicología, rehabilitación, formación, etc. Son preguntas de importancia crucial para los pacientes, los cuidadores, los sistemas de salud y las aseguradoras sanitarias.[5]
Los ensayos clínicos independientes tienen una importancia clave para mejorar la eficacia, la seguridad y la relación coste / beneficio de la asistencia sanitaria. Por ejemplo, los ensayos clínicos estudian los riesgos a largo plazo y las reacciones adversas raras de los tratamientos, comparan las opciones de tratamiento disponibles para determinadas condiciones de salud, evalúan las mejoras esperadas en la calidad de vida o el seguimiento de procedimientos y estrategias de rehabilitación. Invertir en investigación clínica independiente beneficia a la sociedad en términos de reducción del impacto de las enfermedades, la mejora de las estrategias de atención sanitaria y en la contención de costes de los sistemas sanitarios.[6]
En España, por ejemplo, la investigación clínica independiente está financiada por convocatorias públicas promovidas por instituciones como el Instituto de Salud Carlos III (ISCIII) o la Fundación Española para la Ciencia y la Tecnología (FECYT).
Referencias
editar- ↑ Cocconi G. "Independent clinical trials: a commentary". Tumori (citado 2002). Disponible en: [1].
- ↑ European Science foundation. "Forward Look. Investigator-Driven Clinical Trials". Disponible en: «Copia archivada». Archivado desde el original el 24 de septiembre de 2015. Consultado el 30 de octubre de 2014..
- ↑ European Commission. "Q&A: New rules for clinical trials conducted in the EU". Disponible en: [2].
- ↑ Chalmers I. "Biomedical research: are we getting value for money?". Significance (citado 2006).
- ↑ Moses H III, Dorsey ER, Matheson DH, Thier SO. "Financial anatomy of biomedical research". JAMA (citado 2005).
- ↑ Remuzzi G, Schieppati A, Boissel GP, Garattini S, Horton R. "Independent clinical research in Europe". The Lancet (citado 2004).